BIOGRAFÍA
Rob Sweebe nació en 1948 en la isla indonesia de Bali. Tras mudarse a los Países Bajos, estudió fotografía en la Academia de Bellas Artes de Breda, disciplina de la que cultivó prácticamente todas las ramas. En el terreno profesional, se centró en la fotografía comercial y publicitaria. A Rob le encantaba hacer fotos y fue prolífico, tanto en el estudio como al aire libre, tanto para negocios como para particulares.
Al margen de su trabajo profesional, Rob usaba su cámara para crear imágenes del mundo que lo rodeaba. Le fascinan los colores, las formas y las líneas que se encuentran en la naturaleza viva, pero también la interacción entre la mano del hombre y lo natural. Cuando aún era solo un niño, empezó a preocuparse por el impacto del ser humano en la Tierra. Desde muy pronto se sintió atraído por temas activistas, como la contaminación del aire y la superpoblación. Sin embargo, también le fascina la otra cara de la expansión humana: las imágenes desoladoras de paisajes naturales devastados o de edificios abandonados. Y apenas un momento después, Rob es capaz de sentirse conmovido al ver el mimo con el que arreglamos nuestras casas, jardines y ciudades, o la ternura con la que vestimos a nuestros hijos. Esa historia silenciosa, esa ventana a nuestra alma, es la que quiere capturar y preservar.
Desde 1997, Rob ha ido reduciendo poco a poco su trabajo comercial, lo que le ha dejado espacio para ampliar y organizar su trabajo no comercial para exposiciones y festivales.
Como a cualquier fotógrafo o paisajista, a Rob le inspiran los cielos holandeses y la luz difusa que se abre paso en el hemisferio occidental cuando está ligeramente nublado. Algunos incluso entrevén en su obra un sutil toque asiático, un tenue eco de su infancia en el cinturón de esmeralda que suelen reconocer las almas gemelas.
En este sitio, Rob exhibe su trabajo por libre para nosotros, para el público general. Es su exposición permanente, que adapta y amplía constantemente; su colección de imágenes tal cual se mostraron a los ojos bajo la luz de revelado. Imágenes de diversas procedencias y estilos, pero inextricablemente hilvanadas por toda una vida. Ese es el tema central de Rob: poesía, decadencia y rejuvenecimiento.